El Petro es una moneda digital de banco central creada por Venezuela usando tecnología blockchain. El principal objetivo de su creación era permitir un reinicio económico a la nación suramericana y al mismo tiempo erigirse como un contrincante contra el dólar.
La llegada del Bitcoin despertó la curiosidad del mundo para crear nuevas criptomonedas y una de esas criptomonedas es el Petro, la primera criptomoneda lanzada por un banco central, en este caso el de Venezuela, camino que ahora muchos otros bancos centrales están siguiendo con sus propias CBDC.
El Petro es un proyecto sobre el cual el actual gobierno venezolano deseaba hacer a un lado su precaria situación cambiaria y reactivar su economía, la cual lleva ya 10 años en declive. Para ello, el proyecto buscaba diseñar una criptomoneda única para el país que blindara su economía y abriera nuevas puertas de inversión. Sin embargo, la realidad del proyecto es mucho más compleja de lo que la mayoría conoce.
¿Qué es el Petro?
El Petro es una divisa de Venezuela. Una CBDC, o divisa puramente digital emitida por un banco central y que utiliza algunos aspectos de la tecnología Blockchain. Se trata de la pionera en este sentido a nivel mundial cuya creación de forma soberana ha puesto a Venezuela en el epicentro de la innovación en este tipo de tecnología. Esta divisa digital deriva su nombre de la mayor riqueza de este país: el petróleo.
De hecho, el gobierno venezolano sostiene que el Petro y su valor están sustentados no sólo por su inmensa riqueza petrolera, sino también por la inmensa riqueza mineral de la nación. Para ello, el Petro en su whitepaper, indica que el valor del Petro estará estabilizado por una cesta de commodities o materias primas con las que cuenta la nación. Entre esas materias primas están el petróleo, el oro, el hierro, los diamantes, el coltán y el gas. Todo ello a través de una formulación matemática que dictará el precio del criptoactivo en todo momento.
Esta teoría es bastante diferente a otras CBDC, como el criptoeuro (EUROChain) o el criptoyuan (DCEP), pues en este caso, pese a seguir siendo una divisa puramente centralizada basada en la confianza, se busca respaldar el valor en una o varias materias primas.
Orígenes del Petro
Los orígenes del Petro comienzan en 2009, cuando el entonces presidente Hugo Chávez planteaba el aumento en los precios del petróleo para paliar la crisis económica que ya afectaba a su nación.
En un evento con los países de la OPEP planteó la idea de crear una moneda internacional denominada Petro. Su idea era respaldar dicha moneda con las reservas petroleras de algunos países miembros de la OPEP. La moneda, en principio, sería una moneda fiat que circularía entre los países de la OPEP y aquellos que aceptaran la misma como medio de pago.
Esta no era la primera vez que Hugo Chávez planteaba la idea de crear monedas alternativas al dólar para intercambios de comercio internacional, con el objetivo de eliminar a Estados Unidos la capacidad de someter a otros países debido a la supremacía de su divisa.
Otra idea anterior al Petro fue, el SUCRE (Sistema Unitario de Compensación Regional), creado en 2008. Esta moneda y unidad de cuenta fue adoptada por los países que formaban parte de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), más Ecuador. Sin embargo, desde 2016 el sistema ha caído en desuso, hasta el punto que no se han emitido informes de gestión desde ese año. Además los únicos bancos centrales que aún usan el sistema son el Banco Central de Cuba y el Banco Central de Venezuela.
Pese al constante impulso del entonces presidente Hugo Chávez y su relevo, Nicolás Maduro, las idea del Petro tardaron tiempo en concretarse. De hecho, no fue sino hasta 8 de diciembre de 2017 cuando realmente el proyecto tomó forma con la salida del Decreto 3.196. Este decreto habilitaba la creación de la Superintendencia de los Criptoactivos y Actividades Conexas Venezolana (SUNACRIP). La creación de este ente buscaba regular las actividades de minería y uso de criptomonedas en la nación suramericana, convirtiéndose en el primer país de la región con una entidad legal de este tipo.
La SUNACRIP habilitada para este tipo de tareas comenzó a trabajar para desarrollar el Petro finalmente. En un principio, se habló de que el Petro sería un token basado en la red Ethereum. Luego cambió la perspectiva y se hablaba de que estaría basado en la tecnología de NEM. Finalmente el proyecto contó con el apoyo de elementos de la comunidad DASH Venezuela, y el Petro sería entonces un derivado de Dash. Estos cambios de formas y tecnologías fueron el génesis de muchas críticas al proyecto, pero finalmente el Petro era una realidad, con un whitepaper idéntico a Dash, sin una tokenomic clara y muchos puntos oscuros, el proyecto se convirtió en una realidad.
Origen económico del Petro
Ahora bien, el origen del Petro también tiene un punto económico importante. Seguramente sabrás que Venezuela es el país con las mayores reservas de petróleo del mundo. Esto convierte a la nación suramericana en un polo de desarrollo de la región, con un potencial enorme.
Sin embargo, la realidad del país es otra muy distinta. Desde 2006, el país ha afrontado una dura situación económica y una pronunciada baja en la productividad de todas sus industrias. Los embates de esta situación no habían llegado a la población con fuerza debido a la bonanza petrolera, a una economía altamente subsidiada, y un Estado que daba e imprimía grandes cantidades de dinero.
La situación económica del país fue empeorando en los años 2008-2009. En esa época, Hugo Chávez buscaba maneras de tener un mayor control cambiario en la nación. El control de ese entonces estaba limitado por el dólar y otras monedas extranjeras, por lo que buscó la forma de crear mecanismos económicos internacionales que estuvieran fuera del control del dólar.
El SUCRE y el Petro eran sus cartas de triunfo en este juego económico internacional. Sin embargo, el bajo uso del SUCRE y el fallo inicial del Petro, llevaron al gobierno a desechar esas ideas. La muerte del presidente Hugo Chávez en 2013, solo fue otra variable que hundió completamente la idea de crear una moneda de estas características. Esto pese a las enormes dificultades económicas que ya atravesaba la nación.
Pero desde la muerte de Hugo Chávez en 2013 y hasta 2017, el gobierno de Nicolás Maduro, en su estudio por la búsqueda de mejores condiciones económicas para el país harían que el Petro se retomara. Una serie de situaciones hicieron necesario trabajar el problema desde otra perspectiva:
- El endurecimiento cambiario, lo que hacía cada vez más difícil a las empresas adquirir divisas e importar las materias que necesitaban para su funcionamiento.
- El enorme gasto público, con un Estado que da trabajo a más del 80% de la población activa y que les ofrece grandes ayudas económicas.
- Los encajes bancarios asfixiantes, lo que desincentiva a los bancos a realizar préstamos u otorgar créditos.
- La gran emisión de dinero por parte del Banco Central de Venezuela, llegando a la situación de que los ciudadanos preferían usar los billetes para realizar manualidades.
- Una enorme y creciente deuda interna y externa, de la nación debido al incremento en la inflación, la baja producción económica y la imposibilidad de pagar los intereses de la deuda.
- La baja de los precios del petróleo, que dejó a la nación sin su principal fuente de ingresos.
- Una baja producción petrolera, de la cual PDVSA viene padeciendo desde 2007 debido a un plan de extracción erróneo que llevó al abandono de sus pozos de crudo liviano en favor de sus pozos de crudo pesado.
- La caída en la producción agrícola y ganadera.
- Los bajos salarios de la mayor parte del población.
- El éxodo masivo e inmigración interna de sus habitantes.
- Una caída sostenida de la calidad de los servicios públicos y privados en la nación.
- La llegada de sanciones de Estados Unidos y de la Unión Europea debido a la violación de derechos humanos, apoyo al narcotráfico, terrorismo
Ante todas estas situaciones el gobierno optó por lanzar el Petro pero, para sorpresa de muchos, en forma, de CBDC, bajo la premisa de que al ser una divisa digital podrían retener el control de la misma, saltarse los bloqueos de Estados Unidos, y tener a su disposición un medio de pago de alcance internacional. Con todo eso en mente, comenzó la creación del Petro con el fin de afrontar todas las condiciones económicas negativas de la nación.
Objetivos tras la creación del Petro
Los objetivos que llevaron a la creación del Petro son bastante complejos y diversos. La verdad es que existen diversos componentes, pero los más importantes son los siguientes:
Un componente ideológico
En medio de la “Guerra contra el Imperialismo”, la “Lucha contra la Guerra Económica” y el “Dólar Criminal”, el Gobierno de Venezuela instó a la creación del Petro para derrocar la hegemonía del dólar e imponer un nuevo modelo para los pueblos. En medio de esa lucha, está la censura de sitios como DolarToday (una web que muestra el precio del dólar paralelo tomando como referencia el tipo de cambio en exchanges en Colombia). Así como también, el férreo control cambiario y la creación de la Ley de Ilícitos Cambiarios que penaba las transacciones en moneda extranjera. Este componente ideológico va en consonancia con las prácticas que el Gobierno ha aplicado desde 2003 hasta la actualidad.
Un reseteo para la economía
La economía venezolana tiene un claro espejo en el tipo de cambio de su moneda con respecto a las monedas extranjeras. Desde 2003 y pese al boom petrolero, la economía venezolana ha ido en declive a excepción de la industria petrolera que mantuvo los gastos de la nación. Sin embargo, desde ese momento los tipos de cambio del bolívar frente al dólar se dispararon, hasta el punto que hubo dos reconversiones. En la primera reconversión (2007), se le quitó 3 ceros a la moneda, y en la segunda (2018), se le quitó 5 ceros a la moneda. Pese a estas medidas y otras que buscaban frenar el alud hiperinflacionario que se vivía, la moneda se sigue devaluando rápidamente, en medio de una emisión descontrolada de dinero por parte del mismo Gobierno.
En ese escenario, la creación del Petro buscaba detener esto al crear un sistema de contabilidad doble que pusiera freno a la subida del dólar. El mecanismo era sencillo, se iba a usar el Petro como referencia al dólar, y esa referencia se iba a anclar a una determinada cantidad de Bs, haciendo que el Petro fuera un estabilizante económico. Esto debería servir para darle oportunidad a la economía de hacer un “reboot” potenciado por otros planes de gobierno.
Evitar las sanciones
Otro de los objetivos que llevaron a la creación del Petro era el de crear un mecanismo de intercambio internacional que permita evitar las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea. En palabras del economista Vladimir Adrianza, el objetivo es convertir a Venezuela en una economía no dependiente del dólar.
«La idea es que eso permita traer al país bienes de capital, en otras palabras, maquinarias, tecnología que permita hacer localmente la producción de la mayor cantidad de cosas posibles (…) eso es un camino que tiende a dar un bypass para buscar otros caminos con respecto a lo que es la economía dependiente del dólar estadounidense»
Vladimir Adrianza, Economista de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
Datos técnicos del Petro
De los datos técnicos del Petro solo sabemos aquellos que se han publicado en su whitepaper oficial. Más allá de eso no se sabe absolutamente nada más, no existen detalles sobre la tecnología criptográfica usada en su firmas digitales, ni el tamaño de su blockchain, ni cuántos nodos existen en la red.
A todas luces el desarrollo del Petro es un secreto nacional y más allá de los datos hechos públicos no se conoce nada más. De todos esos datos podemos darte un condensado de los mismos en la siguiente tabla.
Característica | Descripción |
---|---|
Nombre | Petro (PTR) |
Protocolo de Consenso | PoS y PoW |
Algoritmo de Minería | X11 |
Blockchain | Privada |
Confirmación de transacción | 5 bloques |
Tiempo de emisión de bloque | 60 segundos |
Creación de un Masternode | 5000 PTR |
Explorador de bloques | https://explorador.petro.gob.ve/ |
Pre-minado | 100.000.000 PTR |
Recompensa Masternode | 0.001 % |
RPC Port | Reservado |
Staking | 85/15 |
Tamaño de bloque | 4 MB |
Unidad mínima | mPTR (0,000001) = 1 mene. |
A la luz de estos datos es claro que Petro está basada en el software de DASH. Estructuras como nodos, mineros y masternodes son parte esencial de la red Petro. Pero todos esos datos son clasificados por el Gobierno, y nadie ha dicho nada oficial sobre los mismos.
Lo que sí se sabe es que varias Gobernaciones, instituciones y el Banco Central de Venezuela practican minería de criptomonedas, entre ellas la del Petro y Bitcoin, pero nuevamente se desconocen datos públicos de estas acciones pese a que son realizadas por instituciones de gobierno y por lo tanto deben ser declaradas públicamente.
¿Dónde puedo comprar el Petro?
La única forma de comprar el Petro es dirigiéndose a la web oficial del Petro o los exchanges venezolanos habilitados para esta tarea. La compra puede realizarse usando criptomonedas como Bitcoin, Bitcoin Cash, Ethereum, Dash, euro, rublos o yuanes directamente. También es posible comprar el Petro de forma presencial en la única taquilla nacional ubicada en la sede de la SUNACRIP en Caracas.
De todos estos medios los exchanges más renombrados para la compra de Petros son:
- Italcambio
- Amberes Coin
- Cave Blockchain
- Valoralta Casa de Bolsa
- Criptiaexchange
- Criptolago
- Criptoactivo Bancar CA
Tratar de comprar Petros por otro medio es altamente arriesgado e incluso por estos medios, ya existe un gran riesgo de perder tu dinero por malos funcionamientos.
Las realidades del Petro: la “criptomoneda” que no es una criptomoneda
Ahora bien el Petro pese a ser una buena iniciativa, la verdad es que deja mucho que desear. En esta sección examinaremos cómo la cruda realidad ha llevado al Petro a ser un proyecto del que todos pasan y prefieren permanecer alejados. Antes de nada hay que decir que el Petro no es como Bitcoin, es decir, no es una criptomoneda, es una CBDC. Pero más allá de eso, hay otras realidades que comentaremos a continuación:
Nadie sabe quien desarrolló el Petro, ni se conoce la hoja de ruta para mejorar la tecnología
En la criptocomunidad estamos acostumbrados a que los desarrollos de criptomonedas tengan un grupo de personas claramente identificadas, incluso con pseudónimos o identidades digitales que usan para proteger su identidad real. Estas personas cargan con la responsabilidad y tienen papeles importantes en el desarrollo de estas criptomonedas. Pero sobre todo, tenemos acceso al código fuente de la criptomoneda.
Sin embargo, en Petro no tenemos nada de eso. Lo único que se sabe es que el Petro fue creado por la SUNACRIP, no hay nombres, no hay repositorio de software y no sabe absolutamente nada sobre el funcionamiento real del Petro.
Petro es una moneda digital completamente centralizada, cuyo desarrollo es completamente cerrado. Dicho esto, también vale aclarar que siendo el Petro un desarrollo cerrado, este viola la ley venezolana, puesto que los desarrollos digitales de la nación deben ser software libre debido a la Ley de Infogobierno, en su Artículo #34. Sin embargo, desde la SUNACRIP hacen caso omiso a este detalle y se niegan a dar información sobre la misma.
Por otro lado, no existen por el momento interfaces abiertas, ni APIs con las que crear aplicaciones de terceros que permitan usar el Petro. La única API activa es un sistema de consulta de precios, y no se puede decir que sea algo abierto o transparente.
Datos falsos de la preventa y su ICO
Un dato curioso del Petro está relacionado con la preventa y la ICO del Petro. En el caso de su preventa, está aparentemente comenzó el 20 de febrero de 2018 a las 08:30 a.m. En dicha preventa se vendieron un total de 38.400.000 tokens disponibles con un valor de referencia de 60 $ USD cada uno. En total la preventa alcanzó los 2,3 billones de dólares. Sin embargo, estos datos de preventa no pueden ser verificados por ningún medio y no existe evidencia de que tales compras hayan sido realizadas en algún momento.
El 20 de marzo de 2018, se llevó a cabo la oferta inicial de monedas de un token sobre Ethereum. En ese entonces se ofertaron 44.000.000 petros disponibles a la venta con un precio de venta de referencia de 60 USD. Sin embargo, tampoco existe evidencia alguna de esta venta.
Ante la falta de evidencias tanto en personajes declarando la compra como en transferencias off-chain y on-chain, la comunidad ha tomado estos datos como un mero acto de propaganda para la moneda, algo que no es nuevo en las ICOs de criptomonedas.
¿El Petro es una Stablecoin?
Otro punto curioso del Petro es si estamos ante una stablecoin o no. Esta pregunta se responde observando el whitepaper de la criptomoneda, donde se establece la forma en el que el precio de esta criptomoneda se establece.
En el whitepaper podemos ver la siguiente formulación para calcular su precio:
La formulación nos muestra que el precio del Petro reacciona a los precios de los commodities que le respaldan. Es decir, el precio del petróleo, oro, diamantes, gas, hierro y coltán, afectan el verdadero valor del Petro.
Sin embargo, la realidad es muy distinta. El presidente Nicolás Maduro ha modificado a su antojo el precio de la criptomoneda, su forma de cálculo e incluso las políticas de anclaje y emisión de esta moneda.
Una criptomoneda que no se puede minar, aunque su whitepaper dice que sí
Por otro lado, el Petro fue creado con el fin de habilitar la minería y el staking de la criptomoneda, eso está claramente estipulado en su whitepaper. Sin embargo, todo estos factores cambiaron debido a un anuncio del presidente de Venezuela Nicolás Maduro. En el anuncio afirma que la moneda no podrá minarse y que mantendrá un precio estable de 60 $ USD por token, evitando así especulaciones con el precio de la criptomoneda. Además, la emisión será controlada directamente por el gabinete económico de la nación.
Una unidad de cuenta, dos precios distintos y un anclaje que no se cumple
Uno de los hechos más curiosos del Petro es que este busca convertirse en la moneda de uso diario del país. Es decir, el Petro está pensado para desplazar o convivir con el bolívar como moneda de curso legal y de unidad de cuenta. Sin embargo, la moneda presenta graves problemas de usabilidad en especial por el precio definido de la misma, ya que en principio existen dos precios: un valor fijo y el valor libre.
En primer lugar, el valor libre del Petro tuvo un valor inicial de 3.600 bolívares en noviembre de 2018. Este valor en Bs era usado como referencia interna para los venezolanos, y en ese entonces, 3.600 Bs eran 60 $. Pero para agosto de 2019, ese precio se ubicó en 700.000 bolívares, una devaluación de más de 19.400 % en su valor en menos de un año. Y en la actualidad, agosto de 2020, el precio del Petro se ubica en 17.988.193,92 bolívares, una devaluación de más de 499.600 % en menos de dos años. Esto es una clara muestra que el precio de valor libre sigue marcando la profunda depreciación del Bs frente al resto de monedas internacionales como el euro, el yuan, el rublo e incluso contra el mismo Petro.
Por su parte, el precio fijo fue eliminado este 2020. Este precio fijo, era el que definía los pagos de impuestos y salarios de la nación. Al eliminar esta unidad de cuenta, los salarios de los trabajadores quedan en el limbo porque no hay un sistema de tablas salariales claro para definir los salarios. Esto sin embargo, solo ha afectado los salarios puesto que los impuestos y otros servicios del Estado se cobran usando el precio libre del Petro. De allí la enorme diferencia de precios entre los servicios que presta el Gobierno y el salario de la mayoría de trabajadores del país. De hecho, el salario promedio mensual de un trabajador en Venezuela es de unos 8$.
Un explorador de bloques que no funciona
El explorador de bloques del Petro ha sido otro punto flojo de la “criptomoneda”. Desde fechas que datan de 1970, errores constantes en el funcionamiento del mismo, limitaciones de acceso, transacciones que jamás aparecen hasta transacciones fantasmas que no tienen ningún sentido, todo es posible en el explorador del Petro.
Una criptomoneda que reinicia su blockchain
Cuando hablamos de blockchain hablamos de una tecnología altamente segura que nos da la certeza de que toda transacción resistirá hasta la peor de las catástrofes debido a su descentralización y la forma en cómo ha sido diseñada esta tecnología. Sin embargo, esto es una fantasía inalcanzable con el Petro.
A finales de Abril de 2020, una serie de problemas comenzaron a verse dentro de la plataforma del PetroApp, que terminaron afectando el funcionamiento de la misma y de todos los exchanges. Los problemas se solucionaron en la primera semana de Mayo, pero muchos usuarios de la moneda Petro (especialmente aquellos que habían trasladado sus saldos a PetroApp y el Banco de Venezuela) reportaron que sus saldos habían desaparecido por completo y que sus transacciones no aparecen en la blockchain.
La comunidad cripto venezolana investigó el hecho y descubrieron lo que pasó: la blockchain de Petro se reinicio desde 0. Toda transacción que haya tenido lugar antes del 6 de mayo de 2020 simplemente no existe. De hecho, todos esos bloques jamás existieron porque el nuevo bloque génesis de la criptomoneda es del 5 de mayo de 2020. De un solo extraño suceso se borraron casi dos años de historia blockchain, y nadie informó del suceso. Puedes acceder al bloque génesis del Petro acá, pero solo podrás hacerlo por un VPN con IP de Venezuela, porque esta web bloquea los accesos internacionales.
El hecho es extremadamente delicado puesto que muchos de los afectados fueron negocios que aceptaron Petros como forma de pago a través del Banco de Venezuela y con este hecho todo ese historial de transacciones ha sido borrado, dejando a los comerciantes sin el pago correspondiente por sus mercancías.
Una copia total de DASH
Por otro lado, el Petro es, según su whitepaper, una copia de DASH, hasta el punto que funciones como la minería X11, InstantSend y el modelo de Masternodes y staking siguen el mismo sistema de trabajo de DASH.
Pese a esto, las transacciones que se realizan desde la PetroApp, el único monedero o wallet del Petro, no usa InstantSend para realizar operaciones instantáneas entre sus partes. De hecho, las operaciones del petro suelen durar una media de 5-10 minutos en hacerse efectivas completamente.
Exchanges y los diferenciales de precios
Los exchanges son otro factor de alerta dentro del ecosistema Petro. Existen varias casas de cambio que cambian Petros por criptomonedas como Bitcoin, Dash, Bitcoin Cash, Ethereum, o incluso monedas fíat como el Euro. Entre esos exchanges tenemos Criptolago (de la Gobernación del Zulia), Amberes Coin, Cryptia Exchange, Bancar y Cave Blockchain, son también otras opciones.
De todos estos exchanges el único que no presenta problemas en su funcionamiento es Amberes Coin, donde puedes retirar la cantidad de dinero que deseas y existe algo de liquidez. Sin embargo, el precio del Petro en este exchange no supera los 4 millones de bs, frente a los 13 millones que el gobierno dice que vale el Petro. Por otro lado, exchanges como Criptolago ofrecen mejores precios de cambios, pero limitan los retiros a solo 300 mil bs al día, lo que en estos momentos equivale a poco más de 1 euro.
La moneda sancionada
El Petro ciertamente es la primera criptomoneda de una nación, y también es la primera criptomoneda sancionada del mundo. El 19 de marzo del 2018, el gobierno de los Estados Unidos emitió una sanción contra el Petro, estableciendo una prohibición para operar con la mencionada criptomoneda.
A la sanción del gobierno de los Estados Unidos, le acompañó rápidamente una reacción de la comunidad de bolsas de cambios que rápidamente la calificó de estafa, debido a las informaciones falsas que se habían dado sobre su preventa e ICO. Todo esto llevó a que la criptomoneda no fuera tomada en cuenta para listarse en casas de cambio internacionales como Bit2Me.
La moneda inconstitucional y fuera de la ley
Un problema grave que también ha frenado a otros exchanges internacionales a tomar en cuenta la criptomoneda es el inmenso vacío legal y el marco de ley roto en el que gestiona el Petro.
En primer lugar, la existencia del Petro es ilegal debido a que la Constitución de Venezuela prohibe el uso de los recursos naturales de la nación como un respaldo pasado, presente o futuro de la emisión de una moneda o unidad de cuenta. Es decir, el Petro no puede respaldarse con emisiones de bonos de petróleo tal como lo ha hecho el gobierno de Nicolás Maduro porque eso es ilegal en la nación. No solo eso, el proceso por el que el Gobierno ha realizado todas estas acciones rompe todas las leyes de la nación y es más bien un marco legal paralelo con vicios y áreas grises abiertas a interpretación del Estado.
Esa es una situación en la que ningún exchange quiere estar porque se presta para acciones que podrían contravenir sus intereses económicos en caso de que el Estado tome alguna acción en su contra.
Los objetivos de su creación jamás se cumplieron
Quizás el peor problema del Petro como proyecto es el hecho de que ninguno de los objetivos que llevaron a su creación se cumplió.
En primer lugar, su componente ideológico quedó en el olvido. La lucha contra el “Dólar Criminal” ha caído hasta el punto en que el mismo gobierno exige que se realicen operaciones con dólares, como por ejemplo el pago de gasolina en las estaciones de servicios. No solo eso, la mayoría de las empresas públicas en cualquier de sus formas, ahora realizan operaciones transadas en dólares, euros, bitcoin, petros y bolívares. Otra lucha ideológica contra los marcadores de precios paralelos como DolarToday también cayeron en el olvido, sobre todo porque el mismo Banco Central de Venezuela ha establecido en varias ocasiones un precio superior a dicha web para el dólar oficial.
Por otro lado, el reinicio económico nunca sucedió. Los planes de Gobierno (llamados Motores Económicos) nunca funcionaron y la situación económica del país se hizo cada vez más precaria. La estabilización que se buscaba con el Petro se mantuvo por un tiempo prudencial, pero los ajustes de tasas de intereses y encaje bancario tiraron por el suelo todo aquello. Adicional, los aliados económicos de Venezuela, como Rusia, China e India se negaron rotundamente a utilizar el Petro para sus transacciones, dejando a Venezuela con millones de monedas que nadie quería usar. Y recuerda que si Bitcoin triunfa es por el efecto red que consigue, donde millones de personas aceptan usarlo. Eso es lo más importante.
Finalmente evitar las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea solo aplican a personajes del Gobierno y de varias instituciones que representan al mismo como el SEBIN, CICPC y el Ejército. Debido a esto, la mayoría de ciudadanos del país tiene la capacidad de realizar compras a nivel internacional, cosa que ha hecho y ha mantenido, pero su mermada economía debido a la caída del precio del petróleo y la baja producción.
Un potencial enorme con una mala dirección
Pese al gran potencial y las intenciones del proyecto sobre el papel, la puesta en práctica y el resultado han sido un completo desastre. Un punto en el que muchos activistas de la comunidad cripto venezolana han sido bien enfáticos es; que el Petro tenía el potencial de ayudar mucho a la recuperación económica del país.
Crear una criptomoneda con un modelo económico bien definido, con un desarrollo más abierto y un roadmap evolutivo claro, sin duda ayudaría a que la criptomoneda mejore su presencia a nivel nacional e internacional.
Además, la creación de un sistema abierto llamaría a los desarrolladores de la comunidad para abordar los problemas de masificación de uso construyendo una plataforma financiera abierta y libre que facilite el uso de la criptomoneda. Otro punto importante es potenciaría la innovación tecnológica, creando herramientas y nuevos exchanges.
Por último, un marco legal claro, sin áreas grises, ayudaría a que otros exchanges e inversores extranjeros sintieran confianza para invertir en plataformas y servicios criptos en la nación.
Estas son solo algunas de los beneficios potenciales que la comunidad ha destacado, sin embargo, la dirección detrás del Petro ha tomado decisiones en la dirección opuesta. No solo han aplicado más controles, sino que han dejado muchos de ellos en manos de organismos de dudosa calidad legal. Por ejemplo, la SUNACRIP tiene atribuciones legales suprajudiciales que puede usar a discreción sin que se puedan apelar dichas decisiones.
En ese sentido, la mala dirección y manejo de un recurso como una CBDC como el Petro, con un potencial de 30 millones de usuarios se hecha completamente por tierra.
Estados Unidos, el gran señor de la guerra, con su monopolio sobre el dólar y buena parte de la innovación tecnológica mundial, con capacidad de decir a quien bloquear y a quien no, lleva a muchos países a ser sometidos o revelarse. Quienes se revelan pagan las consecuencias. Esto es algo sabido por todos, y Bitcoin plantea una solución a todo ello. Sea Petro, USD, Euro,… todo es parte de lo mismo: divisas fíat. En contra de ello millones de personas hemos dado el paso a Bitcoin, un dinero justo y transparente donde los políticos no juegan con nuestras vidas.