Satoshi Nakamoto es como se conoce al creador de Bitcoin. Y aunque no sepamos quién es o era Satoshi Nakamoto, sí sabemos lo que ha hecho. Si hoy en día podemos comprar bitcoins, es gracias a él.
Él o ella (o ellos) ha inventado el protocolo bitcoin y lo publicó en un artículo científico a través de la Cryptography Mailing List en octubre de 2008.
Nadie conoce su identidad, algo que hace más misterioso todo esto. La identidad de Satoshi es un tema que siempre genera curiosidad. Es por esa razón, que publicamos este artículo haciéndonos eco de las informaciones que existen hasta la fecha.
En 2009 publicó la primera versión del cliente de bitcoin y participó con otros en el proyecto hasta que su presencia empezó a diluirse hacia finales de 2010.
Trabajó con otros al principio aunque se cuidó mucho de no hacer visible información personal y el último que supo de él/ella fue en la primavera de 2011, cuando dijo que “estaba a otras cosas”.
¿Pero, es japonés, no?
“Satoshi” significa “pensamiento claro, ingenioso, sabio”.
“Naka” puede significar “medio, relación”.
“Moto” puede significar “origen o creación”.
No podemos saber a ciencia cierta si era japonés o no, ni siquiera su sexo, edad o cualquier otro dato.
Incluso podríamos estar hablando de un grupo de personas, en vez de un solo individuo.
¿Sabe alguien quién es Nakamoto?
No, pero las conclusiones a las que llega la gente cuando se pone a investigar, pueden dar lugar a informaciones aún más intrigantes. Joshua Davis, del New Yorker, cree que Satoshi Nakamoto es Michael Clear, un estudiante de criptografía del Trinity College de Dublín.
Sacó esta conclusión tras analizar 80.000 palabras de los escritos de Nakamoto y buscando coincidencias gramaticales.
También sospechó del sociólogo, economista y también desarrollador de videojuegos finlandés Vili Lehdonvirta.
Ambos han negado ser los creadores de bitcoin, haciéndolo en público Michael Clear en la Web Summit de 2013.
Adam Penenberg, de Fast Company contradijo esa información asegurando que Nakamoto eran tres personas:
Neal King, Vladimir Oksman y Charles Bry.
Llegó a esta conclusión escribiendo frases sueltas del artículo científico de Nakamoto en Google para ver si se usaban en algún otro sitio.
Uno de ellos, «computationally impractical to reverse», resultó formar parte de una petición de registro de una patente solicitada por estas tres personas, en relación a un sistema para actualizar y distribuir claves de encriptación.
… the outputs of which are fixed-size strings that are computationally impractical to reverse-map. In this manner, the shared secret …
El dominio bitcoin.org originalmente utilizado para publicar el artículo científico creado por Satoshi había sido registrado tres días antes de la petición de la patente.
Se registró en Finlandia y uno de los autores de la patente había viajado allí seis meses antes de que el dominio fuese registrado.
Todos los “implicados” lo niegan.
En cualquier caso, cuando el dominio bitcoin.org fue registrado el 18 de Agosto del 2008, él/la que lo registró utilizó un servicio japonés anónimo de registro y el hosting utilizaba una ISP japonesa.
El registro del sitio se transfirió después a Finlandia el 18 de mayo de 2011.
Es curioso que el dominio con extensión «.com» (normalmente el más deseado, bitcoin.com) se registrase el 4 de Enero de 2008… tal vez es solo casualidad. Actualmente Bitcoin.com es propiedad de Roger Ver.
Otros piensan que fue Martii Malmi, un desarrollador de Finlandia que ha estado envuelto en el desarrollo de bitcoin desde el principio, creando su interfaz de usuario.
También se ha apuntado a Jed McCaleb, un amante de la cultura japonesa que vive allí y que creó Mt. Gox y cofundó Ripple y posteriormente Stellar.
Otra teoría sugiere que los científicos Donal O’Mahony y Michael Peirce son Satoshi Nakamoto, basándose en un artículo científico de los que son autores y que versa sobre pagos virtuales junto con Hitesh Tewari, basado en un libro que publicaron juntos. O’Mahony y Tewari también trabajaron en el Trinity College, es decir, en el mismo sitio que Michael Clear.
Los israelíes Dorit Ron y Adi Shamir del Instituto Weizmann se retractaron de las alegaciones hechas en un artículo donde se sugería un vínculo entre Satoshi y Silk Road, el mercado negro desmantelado por el FBI en octubre de 2013.
Sugirieron un vínculo entre una dirección que supuestamente pertenecía a Satoshi y el sitio.
El investigador sobre seguridad Dustin D. Trammel era dueño de la dirección y se afirmaba que él era Satoshi.
En mayo de 2013, el pionero de internet Ted Nelson añadió más leña al fuego asegurando (vídeo 1, vídeo 2) que Satoshi podría ser el matemático japonés Shinichi Mochizuki, aunque admite que las pruebas son circunstanciales en el mejor de los casos.
En febrero de 2014, Leah McGrath Goodman del Newsweek aseguró haber encontrado al verdadero Satoshi Nakamoto. Dorian S Nakamoto ha negado desde entonces que sepa nada relacionado con Bitcoin, llegando a contratar a un abogado y haciendo una declaración oficial.
Hal Finney, Michael Weber, Wei Dai y otros desarrolladores están entre los nombres que de vez en cuando salen a la luz en reportajes de medios y discusiones en foros online como potenciales “Satoshis”.
Un grupo de lingüistas forenses de la Universidad de Aston creen que el verdadero creador es el profesor de derecho retirado Nick Szabo, basándose en el análisis del artículo científico de bitcoin.
Dominic Frisby, un cómico y escritor también sugiere que Szabo es el candidato con más peso para ser Satoshi en su libro “Bitcoin: El Futuro del Dinero”.
Su detallado análisis tiene en cuenta los factores lingüísticos de lo escrito por Satoshi además de su conocimiento en C++ y su fecha probable de cumpleaños.
En gran medida, todos estos potenciales candidatos a Satoshi han insistido en que ellos no son los creadores de bitcoin.
Michael Weber aún no ha contestado al respecto.
Algunos incluso piensan que Bitcoin ha sido la creación de 4 compañías tecnológicas líderes. Esto pues el nombre de Satoshi Nakamoto lleva dentro pistas hacia ellas: SAmsung, TOSHIba, NAKAmichi, and MOTOrola.
Sea como sea otros piensan que ni siquiera era japonés. Su inglés, en los textos que escribió, muestran matices ideomáticos típicos de un inglés nativo.
¿Qué sabemos sobre él?
Una cosa que sabemos, basándonos en entrevistas con personas que han trabajado con él/ella en las primeras fases de desarrollo de bitcoin es que su sistema está muy bien pensado.
Sus habilidades para programar no eran convencionales, de acuerdo con las palabras del desarrollador Jeff Garzik, ya que según él no aplicaba las mismas pruebas sobre el código que podrías esperar de un clásico ingeniero informático.
[Tweet «¿Qué sabemos sobre el creador de Bitcoin?»]
¿Cuántos bitcoins podría tener?
En un análisis hecho por Sergio Lerner, una autoridad en el mundo Bitcoin y de la criptografía, se sugiera que Satoshi minó la mayoría de los primeros bloques de la red y que podría tener una fortuna de alrededor de un millón de bitcoins.
¿Qué hace ahora?
Nadie sabe en qué está Satoshi involucrado actualmente. Pero en uno de los últimos emails que envió a un desarrollador, con fecha del 23 de abril de 2011, dijo: “me he pasado a otras cosas. Está en buenas manos con Gavin y el resto”
¿Trabajaba para el gobierno?
Aunque existen rumores que dicen que Satoshi podría trabajar para alguna de las agencias de inteligencia de “tres letras” (CIA, FBI, etc.), o incluso tal vez alguna organización en la sombra en busca de una moneda común sobre la que dominar el planeta, el desarrollador Jeff Garzik lo deja claro:
“Satoshi publicó un sistema de código abierto con el propósito de que nadie necesitase saber quién era ni qué conocimientos tenía. El software de código abierto hace imposible que se puedan ocultar secretos. El código fuente habla por sí mismo”.
Es más, fue inteligente por haber usado un seudónimo. Esto pues, obliga a la gente a centrarse en la tecnología en sí misma en vez de en la persona que pueda estar detrás.
A día de hoy, Bitcoin es mucho más grande que la figura de Satoshi Nakamoto. Ya poco importa quien sea para muchos. Su código inicial ha sido mejorado gracias al esfuerzo de algunos de los mejores cerebros del planeta trabajando colaborativamente. Un trabajo que se ha realizado de forma totalmente altruista a diario haciendo cada vez mejor esta tecnología.